domingo, 9 de septiembre de 2012

Donde haya un buen porrón...

No valiente, que más bien mamarracho,
además de presumido y engreído;
cuando, por el vino que se ha bebido,
sólo se trata de un vulgar borracho.

Con volteretas magulló su corpacho,
que siempre él mantuvo tan bien erguido,
ahora todito tiene muy torcido,
hasta los pelillos de su mostacho.

Temblando está por si vuelve Arcellón
y lo pone recto, igual que una vela
acariciándole con un bofetón.

Con argucias quiere liar a Medina
pues nadie le queda al lelo de Antón
que le acompañe a tomar “medicina”.

El Palmero.

1 comentario:

Mari Carmen dijo...

Palmero, ingenioso soneto para Antón, si te rompe el porrón en la cabeza no me hago responsable de tus chichones eh? jajaja, anda, anda y no me gruñas con la "paga" de las actuaciones, de cada dos... tres te dan calenturas y te quedas en camita joíoo.
Ahora en serio. Graciasss Palmero, ya tenía ganas de verte hombre. De verdad que me alegro muchooo.
Un abrazo.