miércoles, 22 de abril de 2015

RITORNELO DEL CORAZÓN

Porque sacan tanto el tema
los de la televisión,
quiero hacerle yo un poema
a ese tema, el corazón.

Una bomba, una sorpresa
es el rojo corazón.
No es la boca la que besa.
besa, besa el corazón.

Un tormento, una tormenta,
una lluvia, una pasión…
A quien todo esto se inventa
se le llama corazón.

Un suspiro, dos suspiros,
tres suspiros… Un montón.
Y los más mortales tiros
los recibe el corazón.

Calla, sufre, pide ansía,
se parte como un limón.
¡Tanto hace cada día
el sangrado corazón!


Ríe, canta,envida, espera.
Nunca encuentra su ocasión.
Porque espera, desespera
el latiente corazón.

Colma arterias siderales.
Tiene nombre de ladrón.
Roba el tiempo y sus caudales
y es robado el corazón.

Da mil sueños, mil encantos.
Da razones, no razón.
Y al final son todo llantos
en el pobre corazón.

Llama, insiste, se arrodilla,
queda al pie de tu balcón,
Cuanto más la luna brilla,
más se humilla el corazón.

Nunca es libre, prisionero
de una u otra obcecación.
Aun creyéndose el primero,
último es el corazón.

Disparata, corre y mata
por las buenas y a traición.
Desatándose se ata
sin pensar el corazón.

Da lecciones y no aprende
la verdadera lección:
corregir a aquel que expende
sin rubor el corazón.

Cariñoso, distanciado,
va del pasmo a la emoción.
Tan ardiente como helado
se demuestra el corazón.

Hace clic y también clas.
Suena din, pero no es don.
Y en un momentito ¡zas!
dice adiós el corazón.

Caballero pareciera
por su gracia y distinción.
pero actúa de manera
diferente el corazón.

Ama pompas, vanidades…
bebe vientos con fruición
y trastoca las edades
del amor el corazón.

Se enloquece, se despecha.
siente pena, indignación.
Es veloz como una flecha
de Cupido el corazón.

Yo le dije al mío un día:
“Para el carro, corazón”.
Y, parándome, tenía
un puñal mi corazón.

Apuleyo Soto.

1 comentario:

Mari Carmen dijo...

D. Apuleyo, no se preocupe que esto del corazón lo arreglamos con una "tirita".
Qué bueno su poema.
Muchas gracias.
Un abrazo