martes, 12 de enero de 2016

Adiós a la vida revuelta del 2015



Que se me va el año,
que se nos va.
Dos mil quince, ceniza,
polvo y nada más,
no por una vida,
por una eternidad.
Que se me fue el tiempo,
que a ti se te irá
a lo desconocido
y sin vuelta atrás.
La ciencia ¿qué ciencia
nos dilatará
la loca carrera
de ser sin parar?
Y además ¿por qué
y para qué ya?
¿Dónde andan Platón,
Cicerón, Juvenal,
Góngora, Quevedo,
Bécquer o Fray Juan?

Dos mil dieciséis
empezando está.
¿Podremos vivirlo
con normalidad?
No nos agobiemos.
No hay rosa inmortal,
pero sin embargo
su olor seguirá…

Apuleyo Soto.

No hay comentarios: