lunes, 4 de febrero de 2013

Mis tres soles.





Delicada y fina piel rosada,
manos con ternura te mecen,
recibiendo tu sonrisa amada
mis gozos crecen y crecen.

Estas personitas merecen
Un ¡ole! ¡ole! y... mil ¡óles!
Ellos mi vida engrandecen
con el brillar de sus soles.

Mari Carmen.

1 comentario:

Arcellón dijo...

Joóh, que envidia!!! Con las ganas que tengo yo de tener nietos, y nada, mis hijos no están por la labor. Ahora que yo me he recogido una preciosa perrita con la que me entretengo un montón y la mimo muchísimo.

Preciosas estas tres criaturas!!!

Un abrazo.