Hoy quiero agradecer a nuestro amigo, escritor y colaborador D. Apuleyo Soto Pajares la gentileza de ampliar gratuitamente mi biblioteca con varios libros de su colección. Muchísimas gracias Apuleyo.
De su libro “Campo de sonetos en rama” aquí os dejo el primero.
Es la llamada de la tierra una llamada honda.
Cuanto más la torturo más me ofrece sus frutos.
En tanto que la cavo o la ahueco, desfonda
de su despensa impar secretos y tributos.
En la tierra yo he hecho mi parada y fonda.
Nada como gozar sus sabores hirsutos.
Nada como sentir el temblor de la fonda
donde acuerdan los vientos sus cursos disolutos.
De la tierra se nutren mis querencias viriles.
Palos de santo lanzo por vallicos y gramas.
Adecento los surcos con tareas febriles.
Me abrazan los arbustos; me cuelgo de las ramas.
Los pájaros en ellas ponen cantos y atriles.
Y en invierno son sombras y en verano son llamas.
Apuleyo Soto.
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