Estoy ardiendo en tu abrasante llama
en aras del deseo de tenerte,
que a voces y con ansia me reclama
poder hacerlo, y cada vez más fuerte.
Preso se encuentra de una fiebre loca
que aumenta de tamaño cada día
cada que piensa en tu divina boca
a la que sin descanso libaría.
No me conforma que me des un beso
por más que hasta hace poco era mi meta,
pero ahora te pido de ex profeso
tenerte para siempre y más completa.
Si no quisieras darme tal ventura,
sería la razón de mi locura.
Cristino Vidal.
1 comentario:
Cuánta pasión en estos versos.¡Fabuloso! Muchas gracias Cristino.
Un abrazo.
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