4 Marzo
TUS DOLORES SON LOS MÍOS
Los dolores cuando tú estás enfermo,
los siento lo mismo que tu los sientes,
subiendo la fiebre por las vertientes,
y yo me asusto, ni vivo, ni duermo.
Tu cuerpo se mantiene como un termo,
lleno de fatales aguas calientes,
te hacen temblar y con esas corrientes
te veo perdido y hundido, yermo.
No me asustes mi amor de esta manera,
que soy débil aunque no lo parezca,
y quiero vivir contigo mi vida.
Ya recuperado de la quimera,
¡sonríe, porque la armonía crezca!
y no adelantemos nuestra partida.
Mari Carmen
No hay comentarios:
Publicar un comentario