GRITO AL MUNDO
Con un gran alarido las ondas de colores
se esparcieron fugaces, como estrellas del cielo,
veloces como el viento, como pájaro en vuelo,
como el suave perfume que regalan las flores.
Es grito de amargura que impregnado de horrores,
lo percibo en el alma que siente el desconsuelo
de vivir con pavor y en mi aullido desvelo
el miedo y las angustias de todos mis temores.
He bramado de rabia al notar la maldad
de la gente que mata sin señal de clemencia,
esos seres malignos no saben qué es piedad,
vocifero a los vientos que no tienen conciencia.
El horror deambula ante tanta malicia
extendida en el mundo, donde ya no hay justicia.
Chelo Álvarez.
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