22
Octubre
LA
BARCA SIN ANCLA.
Se
acerca, una barca a la orilla,
sin
ancla ..sin velas ¡sin mantilla !
Repleta
de personas, asfixiadas de calor,
morenas
por su color, y quemadas por el sol,
sintiéndose
afortunados, y auxiliados ,
sabiendo
que algunos ¡no llegaron !
Por
la borda se cayeron,
y
en el mar ! se quedaron !
Donde
muchos quedaran
en
las profundidades,
entre
estrellas y corales,
rodeados
de y pececillos de colores,
que
los velaran y adornaran como flores,
Los
que llegaron. Hombres..mujeres y niños,
pobres
y desnutridos ¡ pero con corazón !
Desesperados
y hambrientos ¡ personas son !
Que
cuando pisan tierra su esperanza resucita,
por
haber dejado atrás, penuria.. hambre,
y
alguna guerra ¡ maldita !
Y
se nos encoge el corazón.
¿Cómo
se verán esas personas
para
lanzarse al mar,
tantas,
en un cascaron.?
¿Tan
grande será su desesperación
para
desafiar a la muerte sin temor?
Y
reflexiono sin comprender,
a
este mundo cruel y traidor.
¿
Como puede ser, que el siglo veintiuno,
tantas
penurias puedan haber ?
¿Donde
quedo el prójimo.. la igualdad
la
humanidad, y el compañerismo
que
todos deberíamos tener ?
Sin
tener en cuenta, ni razas ni el color,
ayudando
al necesitado, dándole la mano.
llevándonos
todos como hermanos.
Con
agrado y sin discriminación
Sin
importarnos ni la raza ¡ni su color!
Porque
todos somos hijos de Dios.
Rosario
Morcillo