1 Febrero
Empezamos este mes de febrero dando la bienvenida a José Antonio Martínez Egea. Vecino de nuestro pueblo al cual dedica este bonito poema.
¡Adelante, José Antonio!, pasa a nuestro humilde rinconcito.
DEDICATORIA PARA EL PUEBLO DE SUCINA
Pedaleando de Avileses a Sucina
con mi bicicleta G.A.C.
el sol de la mañana me ilumina.
Andado de dos a tres kilómetros
en mitad de una cañada de olivos
oigo el ruido de un tractor
por curiosidad me desvivo.
¡Buenos días! permita que me presente
de Avileses temprano salí
Egea me llama la gente.
El tractorista bajó de un brinco
derramando bondad y generosidad
me llaman Ángel Martínez Peñalver
¿Qué quieres saber?.
Yo levantando la frente
rebusco por toda mi mente.
A Sucina me dirijo
tan solo de niño estuve una vez
deseo saber por fijo
temiendo a que me pueda perder.
A doscientos metros de ésta cañada
en lo alto verás un Palomar
a tan sólo una zancada
por la derecha has de tomar.
Yo muy agradecido
las gracias supe dar
reanudando mi recorrido
humildad saboreo en mi paladar.
Subiendo la cuesta del cuartel
en medio de un melonar
algo puedo ver
pero no lo puedo apreciar.
Apeándome de mi bicicleta
me acerco para saber
la curiosidad me inquieta.
Aquel señor deja la recolecta
con mucha amabilidad se presenta
me llaman Aurelio García Meseguer
y un melón te voy a ofrecer.
Yo no sabiendo despreciar
lo acepto con gratitud
haciéndole saber
que con el tiempo no lo va a perder.
Arriba pisando la cima
mi vista la dejo volar
¡que alegría! allí abajo está Sucina.
José Antonio Martínez Egea
