31 Agosto
Leí en un libro algo que me hizo pensar. Decía: “Lleva cuidado con lo que escribes porque el escrito queda para siempre y cada uno lo interpreta a su manera”
Cada edad o cada etapa te hace reflexionar de una forma diferente a lo que anteriormente dabas por hecho y sentado. Hay muchos temas para tratar. Hoy voy a escribir sobre los matrimonios que se separan después de más de 40 años de casados. Nunca lo entendí. En mi cabeza no cabía que una pareja que se casa por amor, andan juntos y unidos por el empedrado camino de la vida y casi terminando ésta se va cada uno por su lado.
Con el paso de los años la pasión aminora pero el amor y el cariño aumenta cada día más en ese matrimonio que con sus virtudes y sus defectos siempre se han amado intensamente y quieren estar juntos hasta que sólo la muerte los separe.
Luego está la otra pareja, con los mismos aditivos que la primera, pero...conforme pasa el tiempo les predominan más los defectos que las virtudes. Se ven en la recta final de su camino por la vida y deciden no seguir aguantando los baches que el otro le proporciona.
Con el consejo que leí y con el mayor cuidado posible aclaro que éste no es mi caso. Soy de la vieja usanza y de la actitud de la primera pareja, pero, reconozco y no me alarmo de la decisión de la segunda. Todo es comprensible en esta vida aunque a veces pensemos que no.
PRIMERA PAREJA
Si alguna vez te ofendí
te pido que me perdones,
tu sigues siendo para mi
dulce mar de bendiciones.
SEGUNDA PAREJA
Si alguna vez te ofendí
no pido que me perdones,
también tu me ofendes a mi
y no aguanto tus cohones.
Mari Carmen