ABRIL PARA VIVIR
¡Cómo se luce Abril!
¡Cómo nos da flores y lluvias mil!
¡Cómo se nos desparrama
por troncos y ramas
de forma sutil
y cómo en plan jardín de alhelís,
margaritas, clavellinas
y rosas y claveles carmesís porque sí
se despliega sin fin.
¡Cómo salta por prados,
por valles y montañas…,
sin cansarse del campo entreabrir
en la tierra mojada y feliz!
¡Y cómo lanza el sol
en todo su esplendor
de astro zascandil!
¡Cómo nos sonroja,
cómo nos divierte
y cómo nos aloja
en su brillo gentil!
Estoy por decir
que la vida no sería
tan vibrante y armoniosa
sin su existencia juvenil.
¡Ábranse los cuerpos y las almas
al calor del mes bendito
del padrecito Abril,
que más que nada sabe
sonreír, sonreir,
es decir, hacernos vivir
a todos, a ti y a mí.
Apuleyo Soto
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