14 Mayo
DAGUERROTIPO DE SEÑORA AL NATURAL
DOS crenchas marcan al par tu cabello
undoso, resbalando por tus sienes,
al tiempo que remarcan tantos bienes:
el intenso tesoro de lo bello.
Asesino, de entrada, ese destello
con que miran tus ojos sin desdenes;
ofreciendo, por contra, cuanto tienes,
como gracia divina hasta en el cuello.
Ojos vivos de niña enamorada,
que a la vida se entregan con el alma,
en pos de un sueño y una paz dorada;
ojos que ignoran que su luz ensalma
la voluntad dejando ya entregada
de quien, para su mal, miró con calma.
Pedro Crespo
No hay comentarios:
Publicar un comentario