4 Julio
Tú ya lo dices todo en este maravilloso poema. ¡FELICIDADES! Que cumplas muchísimos más en compañía de tus seres queridos y tambien de nosotros eh? ¡Te queremos!
¿QUE CUÁNTOS AÑOS CUMPLO?
Los suficientes para darme cuenta
que la madurez ha llegado,
que he podido recorrer mucho tiempo
viendo amaneceres bellos, pero...
también días tristes y nublados.
Los suficientes para saber
que la juventud ha dejado recuerdos,
algunos malos, otros no tanto.
Que el amor vivido no siempre fue lo ideal
y algunas veces quedaron heridas
que con el tiempo sanaron,
pero las cicatrices recuerdan el dolor pasado.
Los suficientes para ver la vida
de una manera muy diferente,
ya no con sueños de niña
ni esas ilusiones de adolescente.
Los suficientes para dar gracias
por el vientre de mi madre que me prestó su espacio,
por las penas que han sido fuente de alegría,
por los fracasos que me han enseñado a buscar la victoria,
por la mano amiga que me ha ayudado a levantarme,
por la soledad y la paz que en ella encuentro,
por la compañía y la palabra de un amigo.
Porque ahora tengo el tiempo para ver atardeceres,
para reír a carcajadas y dormir a pierna suelta,
porque ahora no llevo dietas, ni me paro en los espejos
intentando ver definida mi silueta.
Ahora puedo jugar a “cuando sea grande” sin sentir temor,
ahora puedo saber que se olvidan las cosas
y las verdades son menos ciertas.
Que se puede jugar a “encontrar objetos perdidos”
y sonreír cuando veo que los llevo en la mano,
“adornar mi rostro” con algo llamado gafas
y poder ver la claridad del día y el rostro de los seres
queridos.
Ahora tengo los años para recordar en silencio
el nacimiento de mis hijos y acariciarlos con ternura en mis
sueños,
para recordar su risa, su llanto y su crecimiento
sin que por ello me riñan al decirme que ya no son unos niños.
Tengo la edad suficiente para darme cuenta que la niñez de los
hijos
se escurrió como el agua entre los dedos
aunque yo los siga viendo como mis hijos pequeños.
Porque hoy tengo la edad, esa que llevo y siento,
porque se puede ser vieja y sentir que el espíritu recién está
naciendo.
Hoy levanto feliz mi cabeza dejando ver las arrugas
que me ha dado el padre tiempo,
muestro a la vida mis canas, con orgullo y sin lamento.
Por eso agradezco a la vida
la misión encomendada,
en cada cumpleaños veo
mi vida realizada.
Con el tiempo me he dado cuenta
que cada experiencia vivida
han sido logros y triunfos
en ciertos fracasos de vida.
Hoy canto, río, sueño, anhelo,
gozo la vida en cada momento,
todo agradezco a Dios,
las risas y el sufrimiento.
Hoy se cruzan los recuerdos y acuden a mi mente,
la niñez, la juventud, la madurez encantada.
“Mis ayeres se quedan conmigo para siempre”
y no es que sea tan mayor, sino que tengo.
¡Mucha juventud acumulada!
Gracias a Dios por permitirme llegar a un cumpleaños más.
Mary del Refugio Martínez