FLORES DE MAYO PARA LA VIRGEN MARÍA.
Hoy también le traigo flores
a la Madre de Dios bella,
así es María, así es Ella,
la dueña de mis amores.
Si pudiera regalarte
de los niños su contento,
llenaría el firmamento
de risas por cualquier parte.
Pues los niños son la gema
de nacarado fulgor,
los que donan resplandor
a tan celestial diadema.
¡Ay, Madre!, de tierra y cielo
Inmaculada María,
bríndale tu compañía,
a quien te ama con anhelo.
A los hombres y mujeres,
a los jóvenes y ancianos
Princesa, extiende tus manos
a mis muy queridos seres.
Te traigo un ramo de rosas
del rosal de mi jardín
y he cogido para ti
de todas las más vistosas.
Tan sólo tengo un rosal,
que a mayo brindan su olor,
te las doy con mucho amor,
a ti Madre Celestial.
Chelo Álvarez
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