29 Julio

 

29 Julio

AGUA DE LA FUENTE A LA PRIMAVERA

¿Qué te queda, afligida primavera?,

si has perdido el pigmento, el colorido...,

tan sólo la oropéndola en su nido

no deja de cantar porque quisiera

que el pesar por la muerte se extinguiera

y volviera por siempre el estallido

de todos los colores, y el tronido

de las nubes rociando la pradera.

Tan sólo soy el agua de la fuente,

que susurra durante cada invierno

y hoy mira tu paisaje con dolor.

Permite, primavera, que te cuente:

aves, vida, jardín, nada es eterno;

insiste en renacer con esplendor.

Chelo Álvarez